Este jueves 9 de septiembre, tuvo lugar en la capital americana la reunión del Diálogo Económico de Alto Nivel (DEAN) entre EU y México, que es la primera de varias entre ambas administraciones. Esta reunión se retoma bajo el gobierno Biden después de que quedó suspendida bajo el gobierno Trump, lo que refleja un cambio importante de estrategia con México.

La reunión mereció la más alta atención de Estados Unidos y de México pues del lado americano participaron la Vicepresidenta Kamala Harris, el Secretario de Estado Anthony Blinken, la Secretaria de Comercio Gina Raimondo, la Representante Comercial Katherine Tai, y el Secretario de Seguridad Interior Alejandro Mayorkas, mientras que del lado mexicano lo hicieron el Canciller Marcelo Ebrard y la Secretaria de Economía Tatiana Clouthier, entre otros funcionarios. El objetivo principal del DEAN es promover el desarrollo, creando empleos y reduciendo desigualdad y pobreza, lo que está dedicado principalmente a México y de paso a Centroamérica para atender la cuestión migratoria.

Después de su desastrosa salida de Afganistán, Estados Unidos tiene más tiempo y recursos para atender otros frentes que le quedan más cercanos y que le son urgentes,entre los que se encuentran Centroamérica y México. Los temas que más preocupan a EU con su frontera sur son migración, medio ambiente, democracia y tráfico de drogas, asuntos en los que México tiene calificación deficiente. El DEAN es una oportunidad para dejar de lado la retórica anti empresarial de la 4T, desarrollando a México y de paso a Centroamérica.

La solución al problema migratorio transita necesariamente por ofrecer buenos empleos y mayor seguridad a la población, invirtiendo en infraestructura humana y física, además de ejecutar un combate efectivo contra la corrupción y el crimen, lo que a su vez fortalecerá la democracia. Los programas Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro son insuficientes y tal vez deficientespara tal fin. Para EU es importante utilizar la agenda económica para fortalecer la colaboración en los temas donde México está en falta. El gobierno mexicano debe aprovechar el momento para fortalecer la cooperación en todos los frentes.

La reunión del DEAN va precedida de una dura carta de asociaciones empresariales americanas que expresan su preocupación por la falta de compromiso del gobierno mexicano con el TMEC. El lado mexicano también tiene quejas contra EU, particularmente en el tema automotriz. El DEAN es una oportunidad para que ambas partes se esfuercen por cumplir lo pactado y que se restablezca la confianza de los inversionistas en México.

El camino para el desarrollo de México y Centroamérica es la colaboración con Estados Unidos. A México se le ofrece la oportunidad de convertirse en pieza indispensable de la proveeduría americana en diversos sectores de cara al conflicto de EU con China y a los cambios tecnológicos que se aceleran con el Covid 19, lo que no se debe desperdiciar.